ciclismo urbano: “EN CANADA SE RESPETA MUCHO AL CICLISTA”.
Chilena Daniela Alfaro Tello , nos cuenta su historia con la bicicleta y de su experiencia en el país del Norte:
Ingeniera comercial, 24 años, Daniela Alfaro Tello , es dueña de un carácter en el que predomina la perseverancia y eso de que nada es imposible.
La bicicleta , ese insecto metálico que nos apasiona, le llamó la atención desde muy pequeña. Y aprendió a pedalear de la mejor forma que se puede hacer: pedaleando. No soportó la idea que su primo, dos años menor , supiera andar en bicicleta y ella no. Así es que se subió no más. Y aprendió en un día. Sin esas rueditas pequeñas de apoyo. No cuenta cuantos porrazos se dio, pero eso es un detalle irrelevante. Lo importante es que se subió y no se bajó más.
Aunque nació en Santiago la mayor parte de su vida ha vivido junto a su madre, Jeanette y su hermano Carlos, ha transcurrido en Iquique, esa ciudad que llaman tierra de campeones. Y se esmera en subrayarlo.
Cuenta que su primera bicicleta fue una Oxford de color roja, a los 11 años y para ella fue todo un logro, una aspiración esperada por largos años.
“Me encanta andar en bicicleta”. Como que se siente liberada . Le pasa lo que a muchos les ocurre con este vehículo de dos ruedas. Crea una relación simbiótica, la ve como una persona, un ser con alma. Les pone nombre, la siente como una amiga, una compañera por la ruta, que es movida por sus propias piernas, por su alma.
Daniela usa su bicicleta todos los días. Es por donde se le mire una milennian.
“yo no conduzco automóvil. ( lo dice con orgullo, como siendo parte de una cruzada). Para mi es liberador salir andar en bicicleta. La uso como medio de transporte, para y pedalear rápido o solo salir a dar una vuelta, a escuchar música.
Recorrer Iquique en bicicleta, sentir el sol en la piel , es para ella una experiencia que requiere repetirla permanentemente.
Destaca que en la capital de la región de Tarapacá, precisamente el borde costero cuenta con una ciclovía de más de 6 kilómetros que recorre gran parte de la ciudad. “Además por su buen clima se puede andar todo el año y es hermoso”, enfatiza.
También en el norte destaca los parajes de San Pedro de Atacama , en el interior de la región de Antofagasta, de los cuales se hizo una fanática- ha ido durante cuatro veranos. . “Allá usar la bicicleta es una necesidad”. Y la usó bastante, incluso para trabajar como promotora de turismo en esa zona, donde realizó una exitosa gestión. Lo que ganó con su trabajó lo usó para lo que son sus grandes pasiones: viajar y renovar cada cierto tiempo su bicicleta.
Daniela recomienda las rutas de Catarpe, Túnel, es un tipo de descenso), La Garganta del Diablo, el Valle de la Luna, Los Ojos del Salar ( cuencas de agua salada en pleno desierto donde uno se puede bañar).
Daniela actualmente se encuentra residiendo desde mayo de este año en Canadá, llegó cuando comenzaba el verano.
Cuando salió a recorrer la ciudad de Ottawa por primera vez la primera vez le llamó la atención el uso masivo de la bicicleta por parte de los ciudadanos, sin distingo de edades.
“De inmediato me puse en campaña para comprarme una. Y ocurrió una de esas cosas locas de la vida. Me regalaron una. ,Cuando la vi me encantó, era de mi color predilecto , hermosa, aunque un poco bajita, pero es un detalle , le subí un poco el asiento y todo anduvo bien. Primero la bautizó como “Preciosa”, pero al cabo de dos meses descubrí que tenía un sticker que decía “La Joya”, así la llama ahora.
“Andamos todo el día juntas, ( sí para Daniela su bicicleta es una compañera, una persona), recorremos la ciudad , el canal de Ridau, me encanta, hay que aprovechar el verano porque el invierno es muy duro.
EN CANADA SE REPETA AL CICLISTA.-
Nos cuenta que en Canadá existe un gran respeto por el ciclista, hay una relación ciudadana armónica.
“Acá en Ottawa respetan mucho al ciclista, hay excelentes ciclovías, con señalética adecuada, semáforos. Incluso si uno indica viraje, basta levantar el brazo y los autos te dan la pasada. Es común ver una niña que trabaja en una oficina con tacos spooder , luego se los quita, los cambia por zapatillas y regresa a su hogar en bicicleta.
Daniela sólo espera que el invierno no llegue muy pronto y seguir disfrutando Canadá arriba de una bicicleta.
